Tailandia y Estados Unidos fueron los anfitriones de la ceremonia de apertura del ejercicio militar anual Cobra Gold, la mayor actividad de este tipo en la región de Asia y el Pacífico, con la participación de 29 países como participantes u observadores.
Hay tres componentes principales del ejercicio, que finaliza el 22 de febrero: entrenamiento de campo militar, asistencia humanitaria y entrenamiento de socorro en casos de desastre. Sus objetivos incluyen
“mejorar la seguridad marítima, prevenir y mitigar las amenazas de enfermedades emergentes y responder a los desastres naturales a gran escala”, dijo un comunicado de los Estados Unidos.
Los marines estadounidenses y otras tropas internacionales se alinearon el martes para participar en la tradición del evento anual de beber sangre de cobras decapitadas, que se cree que contiene beneficios para la salud de los humanos lo suficientemente valientes como para consumirla.
“Tenemos ese potencial de estar separados, especialmente en la selva que es tan espesa y ser capaces de sostenernos es crucial, así que sí, es muy beneficioso y necesario”, dijo a Reuters un infante de marina estadounidense identificado como el sargento Griffin.
Siete naciones además de Tailandia y Estados Unidos son participantes activos: Singapur, Japón, China, India, Indonesia, Malasia y Corea del Sur. Participan alrededor de 4,500 efectivos estadounidenses, en tierra y mar.
Aquí hay una increíble galería de soldados disfrutando de una comida gratis: